02 septiembre 2010

Carta Abierta al Rector

Estas líneas tienen por objeto solicitarle al responsable de nuestra Universidad que interponga las acciones legales que correspondieran con el fin de lograr la declaración de INCONSTITUCIONALIDAD de la Ley Provincial “De ordenamiento territorial de Bosques Nativos de la Provincia de Córdoba” dada su clara contraposición con una norma superior, tal el caso de la Ley Nacional 26331, según lo estipulado por nuestra Carta Fundamental.
Al analizar el primero de los puntos, debemos observar que lo sancionado por la Legislatura de Córdoba sufre embates incontestables, en lo jurídico, atenta contra los presupuestos mínimos de la Ley Nacional Nº 26.331, debido a que establece para la Categoría I (de máxima protección) la posibilidad de un ‘aprovechamiento’ cuando claramente la Ley Nacional establece que sólo se podrán realizar actividades de ‘conservación. Además, se elimina una herramienta fundamental que brinda la Ley Nacional, como son los mecanismos de participación social en el proceso de ordenamiento territorial de los bosques nativos, con lo que todo queda en el ámbito de la autoridad de aplicación, siendo que hasta ahora, lo que ha fallado es el control.
En síntesis, el ordenamiento aprobado no respeta el bosque serrano, única fábrica natural de agua en la Provincia, que con el cumplimiento de lo establecido por la Ley Nacional respecto de preservar las zonas de bosque ubicados en pendientes mayores al 5%’, podría salvarlos de su desaparición y que la reducción arbitraria y sin sustento científico de la protección de márgenes de ríos y arroyos, así como bordes de lagunas y salinas, no hará más que agravar la actual degradación de las cuencas hídricas, principal criterio elegido por los participantes de los siete talleres regionales realizados en toda la Provincia.
Desde lo político y social, nuestra Legislatura soslayó el hecho de que la integración diversa y multisectorial de la COTBN tiene pocos antecedentes: Universidades (Investigadores de nuestra Casa), Federación Agraria, Movimientos Campesinos, INTA, Parques Nacionales, ONGs (entre ellas FUNAM, CEDHA, APROAS y muchas otras), INADI, organismos provinciales (como la Secretaría de Turismo y la Secretaría de Ambiente) trabajaron alrededor de dos años por una iniciativa integra.
Creemos que lo dicho basta para poder avanzar en acciones legales, de manera de lograr una norma que permita el desarrollo de nuestra especie como tal, la que hoy está en peligro por culpa del mismo hombre; y la que solo encontrará soluciones cuando transite el camino de la búsqueda de la armonía con la naturaleza.
Asimismo solicitamos al Sr. Rector, arbitre los medios con los que disponga a fin de que la UNRC no participe institucionalmente de la muestra anual organizada por la Sociedad Rural. En señal de protesta no sólo por la actuación de dicha organización en el tratamiento y posterior aprobación de la ley en cuestión; sino también por las infelices declaraciones de su presidente ante los medios locales. Las expresiones de Julio Echenique no hacen más que agraviar la idoneidad científica de los investigadores de la Universidad Pública en general y la integridad institucional de nuestra Casa en particular. En declaraciones públicas, ni se esforzó ampararse en algún fundamento político, social o técnico, ni hablemos de algún fundamento científico. Simplemente optó por hacerse cargo de su condición de productor agropecuario, defensor de los intereses del capital concentrado y promiscuo representante del conservadurismo político.
Instamos a la comunidad universitaria, a sumarse al firme rechazo de la ley provincial N° 9814; por INCONSTITUCIONAL (al entrar en clara contradicción con el ordenamiento jurídico superior); por SECTORIAL (resultado de claras presiones por parte de los grandes empresarios productores del monocultivo sojero); por INJUSTO (al permitir el gobierno provincial, acceder a las presiones sectoriales antes descriptas; rechazando los resultados de investigaciones realizadas por científicos de la Universidad Pública, denostando los pedidos de organizaciones de la sociedad civil y desoyendo el reclamo de poblaciones campesinas) y por SALVAJE, (al amparar el desmonte por vía del incendio que no está previsto en la nueva norma; al permitir la total destrucción de las cuencas de agua dulce, que nacen en las serranías; al conceder más superficie a la producción de un monocultivo que acarrea la destrucción paulatina pero incesante del suelo; al omitir intencionadamente la conservación de las especies que aún sobreviven en los últimos resquicios de fachinal).

1 comentario:

Estudio Jurídico Molina Negro dijo...

Excelente oportunidad para demostrar que la sociedad tiene conciencia y tiene voz. Para demostrar que ya no la pueden engañar ni engrupir. La ley de Bosques es inconstitucional! El fundamento que esgrimen desde la Sociedad Rural, de que es necesario mayor superficie para producir alimentos para el paìs es tan falso como su interés por la sociedad. En la última campaña se cosecharon más de 55.000.000!! de toneladas de soja y 22.500.000 toneladas de maíz. Díganme entonces que cuantos millones de toneladas más son necesarios para alimentar a menos de 40 millones de habitantes que tiene nuestro país.
Esto no es más que GULA, simple y ordinaria como su hambre por conseguir más y más riqueza a expensas del resto de la sociedad. UNA COSA ES LA PRODUCCION Y OTRA MUY DISTINTA ES EL ESPIRITU RAPAZ DE ALGUNOS REFERENCIADOS PRODUCTORES AGROPECUARIOS.
Esos que no son sino los mismos que vienen manejando los destinos de la Nación Argentina desde hace más de 100 años, los propietarios de grandes extensiones de tierra hoy destinada en gran parte, a un monocultivo. Son los mismos que quebrantan la ley y se siguen riendo en la cara de la gente al evadir impuestos varias veces millonarios. Son los mismos que ponen a nombre de los peones movimientos enormes de divisas para seguir evadiendo, mientras mantiene a los trabajadores del campo en negro, con una situación que hace recordar más al modo de producción de Robustiano Patrón Costas o de Manubens Calvet.
Son los mismos que incendian hectáreas de bosque virgen con tal de sumar lotes a la producción de la soja, son los mismos que utilizan desmedidamente y sin control agrotóxicos que son letales para la vida humana, sin tapujos y a gran escala.
Esos grandes pseudocapitalistas del campo se rien también de la tradición del campo, del modo de vida del interior de la Argentina. Donde abundan los pequeños y medianos productores que con todo esfuerzo trabajan realmente la tierra por un futuro mejor.
El resto son habladurías, no se trata aquí de ser "K" o ser "anti K". O se es patriota y solidario, o se es buitre y vende patria. Esa es la opción!